¿Qué es un masajeador de próstata?

Los juguetes para la próstata más comunes son los tapones anales y los masajeadores, generalmente con motores de vibración y, a menudo, con un control remoto para aquellos de nosotros cuyos brazos no miden cuatro pies de largo con múltiples codos de doble articulación y ojos en los nudillos.

Utilice su masajeador de próstata usted mismo mientras se hace una paja, deslice uno hacia un amigo o ser querido, o deje que lo lleven a la ciudad temblorosa mientras su pene, boca o manos están ocupados. No hay respuestas incorrectas y el juego anal sólo hará que las cosas se pongan más calientes. Honesto.

¿Cómo utilizar un masajeador de próstata?

¿Nuevo en cosas a tope? Considere los siguientes consejos antes de quedarse atrapado:

• Limpiar la pista

Hay un antiguo dicho que sigue siendo válido hasta el día de hoy: las cosas pasan. Pero seamos honestos, si te diriges a la cúpula del placer, es bueno que no sea así. Los gilipollas son como opiniones. Todo el mundo tiene uno y algunos son más apetecibles que otros. Cada uno es mágico a su manera y cada uno de nosotros tiene que explorar qué funciona para nosotros cuando nos preparamos para el juego anal.

Algunas personas son bendecidas por naturaleza, otras pueden tener una rutina de preparación. Esto puede significar tomar suplementos de fibra, comer de manera más saludable, probar supositorios de silicona (disponibles en cualquier farmacia) o simplemente familiarizarse con las duchas vaginales básicas. Si nunca te has duchado, sé amable y empieza poco a poco. Te sorprenderá lo bueno que es sentirse limpio y te ayudará a relajarte cuando experimentes con el juego anal solo o con tu pareja.

• Encontrar su próstata

Nuestro viaje comienza en lo que Julian Clary tituló brillantemente su divertida autobiografía, A Young Man's Passage. Específicamente, unos cinco centímetros. Cuando te sientas bien y juguetón, desliza un dedo limpio (tuyo o de otra persona) o un juguete, untado con abundante lubricante, apuntándolo hacia tu ombligo, y deberías encontrar el oro.

Ve con calma aquí, tu cuerpo es un templo y el ano es el santuario, así que no te vuelvas loco en una cacharrería... todavía. Comience lenta y suavemente y aumente la presión. Necesita encontrar un ritmo adecuado para usted. Una vez que te sientas cachondo, esto aumentará la apuesta y pronto te encontrarás al final del arcoíris.

• Relájate y lubrícate

Experimentar con el juego anal es el comienzo de una larga y hermosa amistad. El tejido dentro del trasero es más sensible que la mayoría y, a diferencia de la vagina, el ano no se autolubrica. Las uñas cortas, las manos limpias y mucho (en serio, muchachos, mucho) lubricante son los elementos básicos para divertirse.